jueves, 23 de junio de 2011

Qué formas tenemos para recibir los sonidos de los cuencos?



Escuchándolos en una sesión grupal mediante la forma de un “concierto”, llamada también terapia grupal de sonido. Los cuencos serán percutidos y frotados combinando eventualmente con algún otro tipo de instrumento como, por ejemplo, campanas tibetanas; tinshas, arpa de boca, los que lograrán una integración mágica de sonido y vibración. Esta forma es más bien meditativa, librada a cada participante a llegar tan profundo como prefiera, garantizando así un estado de relax posterior y eventualmente sanador.
A nivel individual, a través del masaje vibracional. Consta de una serie de sesiones individuales que el paciente concretará con el terapeuta  quien valuará, luego de un diagnóstico previo, la cantidad de sesiones recomendadas según la problemática emocional y/o física que presente.   Los cuencos se apoyan en forma selectiva sobre el cuerpo vestido del paciente, en lugares clave, logrando ciertamente una armonización de chakras y de los planos físico-emocional-mental y espiritual. 

Qué efectos se logran?
Los efectos que se logran son variados y muy buenos, dependiendo del grado de entrega y confianza que el paciente desee. 
Como todas las terapias complementarias, se recomienda una serie de sesiones para lograr la meta deseada, aún así a partir de la 1ª  los efectos relajantes y desestresantes  se ponen de manifiesto.
Mencionaré una lista taxativa de los beneficios que pueden alcanzarse:
  • Alivia preocupaciones; ansiedad y estrés, se induce a una paz profunda.
  • Mejora la capacidad de concentración e incrementa la creatividad.
  • Equilibra los hemisferios cerebrales.
  • Restablece el equilibrio del sistema endocrino mediante el estímulo de la glándula hipófisis o pituitaria.
  • Alivio de dolores físicos, musculares y emocionales (aplicación directa sobre zona afectada).
  • Se potencia la meditación mediante el estímulo de la actividad de las ondas alfa.
  • Desbloqueo energético, se fortifica la fuerza vital mediante la estimulación del líquido cefalorraquídeo.-
  • Experiencias de autoconocimiento.
  • Equilibrio y limpieza de los chakras y del aura (y los órganos y glándulas correspondientes).
  • Limpieza del entorno. 

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